Hoy hace 15 años, tuve mi primer ingreso en el hospital.
Hoy 15 años después, tengo palabras de agradecimiento a todos esos profesionales que me hacen ver desde dentro y gracias a mi esfuerzo a través de cursos la sanidad pública y la importancia en la salud mental, a través de un puesto temporal de celador, en el que estoy aprendiendo muchas cosas.
15 años dan para mucho, y fue justo a los 23 años, cuando te crees que "puedes con todo", cuando "no te crees vulnerable" (todos lo somos), y la vida te da lecciones de aprendizaje, porque o aprendes y agradeces lo que te viene (y te perdonas y lo perdonas, todo lo que ha pasado), o no aprendes, y te vuelves contestario de un sistema social, que a pesar de lo bueno y lo malo que pudiera tener, busca la salud y el bienestar de sus pacientes, de nosotros vamos ...
Durante todo este proceso, he vivido diferentes épocas, algunas para no volver a hacerlas como quitarme la medicación (lo que supuso una caída de nuevo y otro ingreso más).
Al igual, que pensar que los psiquiatras, no querían que "me pusiera bien", pasando por el lado "en ese momento", de ideologías de la anti psiquiatría y de lo alternativo, que promueven y promulgan una salud sin medicación sin importarles lo que le pase al paciente y cobrando por sus consultas a través de lo privado y escondiéndose cuando el paciente cae de nuevo ...
Durante estos 15 años, y a través de mis ingresos, he podido comprobar la mejoría y el avance en salud mental, de forma espectacular.
Uno de los mayores avances, ha sido desde una planta con pocos servicios (duchas, espacio comunes ...)
a otra planta habilitada para una intimidad con el paciente con su familia, con una seguridad para el paciente, y espacios habilitados para hacer más cómodo la estancia del paciente, de nosotros en la misma.
Al igual que si los pacientes, nos comportábamos con respeto y educación a las instalaciones y a los equipos de trabajo, que están para ayudarnos y mejorar nuestra calidad de vida y nuestra circunstancia social y vital que vivíamos / vivimos . Ellos, nos dejaban en la convivencia y en la participación de actividades socioculturales con los mismos profesionales, y nos ayudábamos mutuamente.
Por eso una actitud positiva, ante la vida y ante las circunstancias siempre nos ayuda, si sabemos con quien debemos estar y quien debe participar en nuestro proceso de crecimiento vital mutuo.
Digo sabemos estar, porque en una planta de salud mental, hay personas que son buenas (la mayoría), y personas con intereses no muy alagueños.
Acercarnos a estas últimas, puede perjudicar nuestras circunstancias, asi que ojo.
Como en la vida nuestra, vamos. Cuidado con esas personas ...
Una de las cosas que más contento estoy, es que a través de nuestras experiencias vitales, se está mejorando también los servicios. Ya que darnos voz y visualización a nuestra problemática y de tanta gente, hace mejorar los equipos, los sistemas y en definitiva la salud mental.
La visibilidad a través de los medios de comunicación, y hablar sin prejuicios ni tapaderas, es bueno, para comprender que a través de nuestro sufrimiento, miedo y problemáticas podemos visibilizar nuestro trastorno, pues es a través de esto, cuando entendemos esa debilidad que nos hace vulnerables, pero también fuertes, si comprendemos la realidad de la misma. Y del proceso, que debemos llevar tan individual como único, a través del médico de la mente, del psiquiatra.
El cual, a través de muchos conocimientos, experiencias y aprendizajes a través de los pacientes a través de la medicina, y es a través de esta y del tratamiento único y exclusivo según el paciente y su historia, para hacer lo más inclusivo e integrador su vida, que es nuestra vida y que es a través de la familia, del entorno y de su integración en todos los aspectos, para romper los tabúes y estigmas que quedan en el sector mental.
Creo que estamos haciendo historia, en cuanto a los descubrimientos a través de tratamientos farmacológicos y psicológicos, y también creo que todos podemos tener algún trastorno psíquico, de una o de otra manera.
El tratamiento adecuado, a veces requiere tiempo, la aceptación del paciente también, pero conseguir que el mismo, se re-descubra es un camino a largo plazo, pero sin pausa, pero sin prisa se puede y se debe conseguir.
Con un entorno favorable, desde la familia, a pesar de las tesituras de la dificultad.
Actualmente,. esto es más sencillo, que de hace 15 años se ha avanzado mucho, y se seguirá lo tengo seguro, a través de asociaciones de salud mental en todo el país, coordinadoras nacionales y a través de los pacientes y de los profesionales que tanto nos ayudan, ayer y hoy ...
Por eso y por todo ese proceso, solo me queda decir - Gracias
Hola, yo ya llevo 7 años de hacer sido diagnosticada como persona con trastorno bipolar.
ResponderEliminarQue agradable leer su visión de la vida de un paciente bipolar. Coincido con todo lo que dice. También digo gracias!!!
Saludos
Enhorabuena Víctor, por tu generosidad y sensatez.
ResponderEliminarLa antipsiquiatría es mera ideología, una pseudociencia efectivamente. Lamento que cayeras en semejantes andurriales. Pero supongo que de los errores se aprende. Un saludo.
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