Iba ya con algo de sensación de mareo y cansancio mental, cuando me tocaba trabajar e iba al trabajo.
A pesar de hacer respiraciones abdominales o diafragmáticas, como aparece en el siguiente vídeo, pero a pesar de ello, no me encontraba bien.
Allí con las respiraciones, poco a poco estuve mejor.
Pero después de estar con la enfermera explicándole todo, al levantarme me costaba mucho andar y necesitaba ayuda para andar.
Por eso me pusieron en una camilla, me dieron un medicamento (no lo digo porque son los profesionales sanitarios los que lo tienen que dar), y eso me supuso que me sintiera más tranquilo.
Seguidamente vino mi madre y tuve que echar a llorar por impotencia, y para liberarme. Me sentía mal, por volver al hospital de nuevo. Y me dijeron que no tenía la culpa, ni la responsabilidad, que había hecho muy bien en venir.
En ese sentido y ahora os digo, que si tenéis que llorar, hacerlo. Y me liberé y solté todo, luego me sentí ya mejor.
Me dieron la receta de ese medicamento, por si me volvía a pasar.
Y sobre todo me dijeron que calma, paciencia y tranquilidad.
Cojí hora para el médico de cabecera, para la semana que viene. Ya que ahora estoy de baja laboral médica - baja por enfermedad común -, y el decidirá la semana que viene si me sigue dando la baja, o estoy de alta. Día a día, ahora y siempre claro. Lo que me diga estará bien
Todo esto os lo cuento, por si puedo ayudar a alguien, y sobre todo recomendar que si uno se encuentra mal; aunque este trabajando ir directamente al hospital.
Gracias a Dios, no paso a mayores, pero cuando fuí al hospital me encontraba mal.
Y lo primero es la salud, antes que el trabajo.
Para aprender estamos todos, al fin y al cabo, todos nos equivocamos y esa es la grandeza del ser humano, la imperfección.
Todos tenemos defectos, y yo el primero, y es normal. Lo importante es que todo ha pasado.
Y recurrir a los profesionales es fundamental, cuando los necesitamos. De los que me siento muy agradecido
Si no fuera por ellos, mi primer brote del año 2008, no hubiera vivido, ya que tengo el trastorno esquizoafectivo, aunque la rama de bipolar es más potente y apenas he tenido alguna parte de esquizofrenia leve.
Y sobre todo hablar con la familia, con los profesionales, con todos. La protección social es fundamental, y gracias a ella actualmente trabajo en un servicio especial de empleo.
Que me ayudan, me comprende y me aceptan
Y sobre todo para mí, no exigirme más de la cuenta, ni irme hacia el futuro, porque cada día es diferente, y los planes siempre cambian.
Adaptarme a la realidad, aceptar la realidad, y vivir el presente con sus cosas buenas y malas es clave.
1 cada uno de nosotros, 2 nosotros, 3 la familia con la que convivimos, y resto de familia.
Ya que todo cambia, cuando nos damos a nosotros, aprendemos a vivir en soledad, aunque estemos con la familia.
Y el dar hacia afuera, nos hace olvidarnos de nosotros, y hay que ir hacia dentro.
De las malas experiencias se aprende, y a veces se gana y otras se aprende.
En mi caso, priorizar mi salud, sobre el trabajo, aunque este lo deje sin hacer.
Mi salud lo primero. Lo tengo ahora más claro.
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